Con estas palabras de Julián Carrón y San Agustin, arranco la semana con todo.
El cristianismo es la exaltación de la realidad concreta, la afirmación de lo carnal, el anuncio de la encarnación; tanto que Romano Guardini puede decir que no hay ninguna religión más materialista [es decir, vinculada con la realidad concreta, a la carne] que el cristianismo. El cristianismo otorga valor a las circunstancias concretas y sensibles, por lo cual uno no tiene nostalgia de grandeza cuando se ve ceñido a lo que le toca hacer: lo que tiene que hacer, por pequeño que sea, es grande, porque ahí vibra la Resurrección de Cristo. Estamos “inmersos en el gran Misterio”.
Julián Carrón
Si tu deseo está siempre ante él [el Misterio], él, que ve en lo secreto, te recompensará. Tu deseo es tu oración [tu petición]; si tu deseo es continuo, continua es también tu oración. Si no quieres dejar de orar, no ceses de desear.
San Agustín